La secretaria general del Grupo Socialista sostiene que la Junta justifica su negativa a dar los datos para “no perjudicar al negocio”
La secretaria general del Grupo Parlamentario Socialista, Patricia Gómez, calificó de “aberrante, indecente y vergonzosa” la actitud de la Consejería de Familia de anteponer “los intereses comerciales” de los dueños de residencias privadas frente a la protección de los mayores.
Así, reprochó al Ejecutivo que no haya ofrecido los datos de fallecidos por el COVID-19 en residencias privadas como ha denunciado el Comisionado para la Transparencia.
Para denegarlos, argumentó Gómez, utilizan la excusa de que necesitan el consentimiento de los titulares de las residencias, “cuando no lo necesitan”. En segundo lugar, lo justifican en que “no se puede poner en peligro el negocio de los centros privados”.
“Entre el derecho a la información de los ciudadanos y saber qué ha ocurrido, prefieren proteger a los titulares de las residencias”, remachó.
Valladolid, 6 de octubre de 2020