Home Documentos LUIS TUDANCA EN «LA QUINTA ESQUINA» DE LA 8 DE VALLADOLID

LUIS TUDANCA EN «LA QUINTA ESQUINA» DE LA 8 DE VALLADOLID

por PSOE de Castilla y León

«Mañueco aparte de tomar posesión como presidente no tenía intención de hacer más»

Secretario general del PSOE de Castilla y León. Aplaude el nuevo Gobierno, especialmente la Vicepresidencia dedicada al Reto Demográfico, pero promete permanecer «vigilante y beligerante» ante posibles desigualdades

Sabe lo que es ganar elecciones sin contar con la mayoría suficiente. Él no pudo formar Gobierno en Castilla y León, al contrario que el líder nacional de su partido, Pedro Sánchez. No duda en lamentar la coalición y apuntilla: «Tiene que ser difícil gobernar cuando tienes que hacer todo lo contrario de lo que dijiste». No se refiere con esto al Gobierno central, sino a Javier Igea, el socio ‘naranja’ que le dio el Ejecutivo autonómico al Partido Popular.

El secretario general del PSOE de Castilla y León no parece codiciar ni un gramo del apoyo de Ciudadanos para arrebatarle el Gobierno a Mañueco: «Estoy convencido de que la coalición durará toda la legislatura, porque no es un pacto de gobierno, sino un pacto de poder», vaticinó ayer en el programa televisivo La Quinta Esquina, de La 8 de Valladolid, DIARIO DE VALLADOLID – EL MUNDO y Castilla y León EsRadio. Una entrevista en la que lamentó lo que, a su juicio, es un desgobierno que en nada contribuye «al crecimiento y al futuro de nuestra Comunidad». A su juicio, «Mañueco parece que, aparte de tomar posesión como presidente, no tenía intención de hacer nada más».

Sobre el extenso Gobierno de Madrid, recién conformado con cuatro vicepresidentes y 18 ministros, celebró que se haya puesto «fin a mucha incertidumbre». «Esperábamos que este país tuviera nuevo Gobierno, y ya existe, hay un horizonte macado y ya puede ponerse a trabajar».

Pero, a su modo de ver, lo más importante es que se trata de «la primera vez que un Gobierno de España coloca como una de las primeras prioridades el reto demográfico». Una prioridad que puede beneficiar de forma destacada a Castilla y León: «Tenemos con este Gobierno un importante aliado en esta batalla de la despoblación en la que la Junta no ha hecho lo suficiente».

Muestra de las buenas noticias que espera de ese Ejecutivo central es «la primera decisión del nuevo Gobierno», señala. «Que esa primera decisión haya sido subir las pensiones es una buena noticia para la comunidad más envejecida de España».

«Hemos estado tanto tiempo esperando un gobierno, que no podemos esperar un minuto más», remarca. «Siempre hay un periodo de adaptación, pero ya no se puede esperar. Hay que tomar medidas para el desarrollo y la creación de empleo, para corregir los desequilibrios territoriales… Hay que ponerse a trabajar cuanto antes». Un trabajo que, se mostró convencido, conseguirá que se sigan recibiendo «buenas noticias de este Gobierno».

El Ministerio de Teresa Ribera, dedicado a la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, reviste una especial relevancia al modo de ver del secretario autonómico del PSOE. «Lo primero que quiero destacar es la relevancia de este área, al haberlo colocado en una vicepresidencia», valoró. «Se trata de materias que también llevábamos en nuestro programa electoral en Castilla y León».

Y es que las medidas para la transición energética «aportan soluciones a nuestras cuencas mineras, y también a una España que ha sido silenciada y vaciada». El área del Reto Demográfico contribuirá a que «se empiece a hablar de esa España a la que se ha quitado protagonismo, a ponerse a trabajar. Y en términos económicos, contribuir a la habilitación de infraestructuras, al reequilibrio industrial y económico de este país es importante», matizó.

Se trata de «políticas diferenciadas y favorables a los medios rurales», que habrá que llevar a cabo «en colaboración con los gobiernos regionales». Políticas que tienen una especial importancia en Castilla y León, que está «a la cabeza en pérdida de población» y donde se produce «la ‘tormenta perfecta’ de una baja tasa de natalidad y un elevado envejecimiento, de alta emigración, sobre todo juvenil. Es un problema y no se ha hecho nada». Un territorio donde «hemos tenido varios planes y ‘libros blancos’ poco efectivos. El penúltimo de ellos empezaba negando la despoblación y hablando del efecto positivo de la inmigración. Un efecto que les permitió taparse los ojos, y eso ha sido un tremendo error», añadió.

Ante la tibia reacción de la Junta de Castilla y León sobre los últimos datos del padrón de hace pocos días, que restaban otros 5.000 habitantes al territorio regional, Tudanca aseguró que la puesta en marcha del nuevo Gobierno en España «debe hacer que la Junta se ponga a trabajar de una vez». También se extrañó de algunas declaraciones del Ejecutivo autonómico: «Ahora he escuchado que la Junta tendrá Presupuestos haya o no haya Presupuestos nacionales. ¿Ahora sí se puede hacer y antes no se podía?», ironizó. «Se han dedicado a taparse los ojos».

También contestó Tudanca a los últimos datos sobre lista de espera quirúrgica, que arrojan una mala tendencia: «En tres meses las listas de espera han aumentado un 30%. Y la espera media, que el señor Mañueco prometió que iba a ser de 30 días, está en el triple. Tres meses para ser intervenido, con un incremento histórico».

«La explicación es echar la culpa a los anteriores, como si los anteriores fueran de un partido bolivariano, pero es que eran los mismos, y a los que los cómplices necesarios de Ciudadanos han mantenido en el Gobierno después de haber perdido las elecciones», aseveró. «Me parece que es una ofensa a la gente de esta tierra decirle eso, pero lo que le están haciendo a la sanidad es peor».

Según el secretario general de los socialistas, empeora aún más la situación el hecho de que «están pretendiendo instalar un plan piloto en la sanidad rural que va a terminar de dar la puntilla». Y es que, a su modo de ver, «le han añadido la soberbia, venían como unos mesías, a arreglar los problemas de esta Comunidad Autónoma en apenas unos meses, y lo que están haciendo es empeorarlos de forma muy sensible ante la pasividad absoluta del señor Mañueco». Fue en este contexto en el que el entrevistado añadió: «parece que aparte de tomar posesión como presidente de la Junta, no tenía intención de hacer nada más».

En cuanto a las relaciones de la Junta de Castilla y León con el Gobierno central, de distinto color político, el secretario autonómico del PSOE aseguró que por parte del Gobierno de España eso no influirá. «El problema es si algunos quieren usar las instituciones de aquí, y el Gobierno que pactaron pero que no ganaron, para utilizarlo de forma partidista», avisó «Eso sí sería preocupante. Pero el compromiso del Gobierno de España con Castilla y León sé que no dependerá de la actitud del Gobierno autonómico, porque los castellanos y los leoneses no son culpables de cómo actúa».

La crítica al Ejecutivo regional no se quedó ahí: «El Gobierno de Castilla y León no es que no se entienda con los socialistas, es que no se está entendiendo con nadie», espetó. Como ejemplo esgrimió «la primera huelga general de funcionarios de nuestra historia, a los tres meses de gobernar, porque no cumplieron el pacto firmado para la aplicación de las 35 horas».

Un equipo de Gobierno que «está poniendo en riesgo el diálogo social, que está paralizado». Ni siquiera hay acuerdo, dijo, «entre consejeros y consejeras», que «no se entienden con un presidente completamente ausente». Eso sí, «se entendieron muy bien para repartirse los cargos».

Pero estas «peleas partidistas» a los ciudadanos «no les importan nada». Por eso, dijo, «preferiría estar hablando que abrir los comedores escolares, de que los libros de texto fueran gratuitos, de reducir las tasas universitarias, de reindustrialización, de creación de empleo, de poner en marcha un plan de retorno del talento para que los jóvenes que se han marchado puedan volver… Pero ahí están, hablando no se sabe muy bien de qué».

En cuanto a las futuribles actuaciones del Gobierno de Sánchez en Madrid, Tudanca se comprometió a permanecer «vigilante y beligerante» con los intereses de Castilla y León. En ese sentido, aseguró que el PSOE regional nunca ha abandonado esa actitud, y puso como ejemplo el cierre de ventanillas de venta de billetes de Renfe en estaciones rurales. «Antes incluso que se firmaran los acuerdos de investidura, el PSOE de Castilla y León se posicionó en contra de este cierre. Reivindicamos públicamente y en privado, de forma directa con el Ministerio de Fomento para que se resolviera. La venta de billetes de Renfe se han restablecido o se van a restablecer en los pueblos».

«Somos leales al Gobierno de España, pero seremos beligerantes en lo que corresponda», aseguró, «igual que hacemos con el Gobierno de Castilla y León. Nosotros no vamos poner en duda su legitimidad ni la democracia, pero vamos a hacer nuestras propuestas».

Una ley de cambio climático para la Comunidad, blindar el gasto social o luchar contra la corrupción son algunas de las medidas que defendió Tudanca, esto último «con comisiones de investigación que se pararon y ahora se han puesto en marcha».

Sobre el proceso de renovación interna en Ciudadanos, se mostró seguro de que no influirá en Castilla y León. «Estoy convencido de que el pacto durará toda la legislatura porque no es un pacto de Gobierno, sino un pacto de poder. Lo que siento es el daño que van a hacer a esta tierra, porque están liados en sus disputas de la derecha y no están gobernando bien, no se están entendiendo con nadie y eso coloca a nuestra Comunidad en mala posición». Una disputa interna que no sólo afecta a Ciudadanos, a su entender, sinoal PP también. «Yo no veo otra cosa en el PP y Ciudadanos que la pelea por la sucesión, por las malas herencias que han dejado». Y es que «parece que el gran triunfo de la derecha fue dar un perfil moderado, pero ahora en el PP echan de menos a Herrera desde hace mucho tiempo», aseguró.

La mala labor que, según Tudanca, está realizando el Ejecutivo regional, se extiende a las cuentas: «Este año hemos multiplicado casi por nueve el objetivo de déficit, y le vuelven a echar la culpa a los anteriores, a la herencia recibida, que son los mismos», lamentó. «Eso hay que resolverlo, porque necesitamos inversiones en centros de salud, centros educativos, iniciativas económicas… Nuestra gente está apuntada a la lista de paro en Madrid y en Barcelona porque aquí no hay empleo».

En cuanto a esas cuentas, criticó la falta de Presupuestos en los últimos ejercicios: «Un gobierno que no hace Presupuestos es un gobierno que no gobierna», señaló. «Todo lo demás es floritura y literatura. Hace mucho tiempo que han dejado de gobernar».

No pudo faltar una alusión al conflicto creado por el alcalde socialista de León, al abrir el debate de una autonomía para la provincia. «Vivo a caballo entre León, Burgos y Valladolid, pero mi familia es ya leonesa. Conozco el sentimiento leonesista que hay allí, hace años», aseguró. «Ese sentimiento es agravio, desafección, lejanía, y se encuentra también en Soria, en Zamora, en todas las provincias. Es el problema de esta Comunidad».

Sin embargo, «los esfuerzos inútiles conducen a la melancolía», subrayó. «Debemos trabajar por lo que tenemos, que es esta Comunidad Autónoma». Por ello aseguró que no defenderá «nunca, como socialista, que las prioridades sean las banderas y las fronteras». Dijo respetar esos sentimientos leonesistas, «pero no comparto lo dicho por el alcalde de León», apostilló. «El PSOE concurrió a todas las provincias con un programa electoral que no hablaba de eso. Nosotros luchamos por la cohesión territorial, por un proyecto político que ha sido abandonado por el PP hace muchos años, para que esta Comunidad crezca. Entiendo el sentimiento leonés, pero ese no es el proyecto del PSOE».

Contra lo que hay que luchar, aseguró, es «contra los desequilibrios», porque son «el origen de los sentimientos identitarios». Unos sentimientos sobre los que ha habido «ejemplos dramáticos» en España. «Sin restar un ápice a la historia milenaria de León y de otros territorios, no me parece útil», matizó.

Tudanca volvió a sacar a colación las diferencias territoriales»: «Se ha escrito que si Castilla y León fuera un país no sobreviviría a los desequilibrios. Los datos de lista de espera señalan que el Hospital del Bierzo triplica la media, pero también hay provincias que van a superar número de jubilados al número de trabajadores».

Por eso «el sentimiento es libre. Está extendido por muchos territorios de la Comunidad, pero la gente no se levanta todos los días pensando que esto es el principal problema. Les preocupa que sus hijos, después de estudiar, se tengan que ir a Madrid o Barcelona, o que sus padres o abuelos estén en un pueblo y vayan a tener o no un consultorio médico, o si le van a subir el sueldo mínimo para salir de la pobreza».

El líder de los socialistas castellanos y leoneses valoró de forma positiva la relación del Ministerio de Transición Ecológica y el Reto Demográfico con Castilla y León, así como que la ministra Teresa Ribera haya nombrado jefe de gabinete a Álvaro Abril, «compañero y amigo, de Valladolid, lo que demuestra que la vinculación la hay y la va a haber».

Preguntado sobre la actitud de Óscar Puente, un peso pesado en el partido que ha preferido quedarse en Valladolid, Tudanca aseguró que el regidor vallisoletano «ha demostrado con sus hechos que su interés es ser alcalde de Valladolid y le ha ido bien. La gente le ha respaldado, le aprecia, le respeta y sabe que les defiende. Él ha decidido quedarse y me parece que hace bien», afirmó.

Sin embargo, en cuanto a las manifestaciones de Puente en defensa de las inversiones en Valladolid, apuntó: «Él, como alcalde, tiene la obligación de defender a su ciudad, pero sabe también que la obligación no sólo es la igualdad sino la equidad, y eso significa dar más a quien más lo necesita. Ése es el proyecto socialista, a eso vine y es lo que voy a defender», apostilló.

Por eso sacó a colación su etapa como secretario general del PSOE de Burgos, su provincia natal. «Defendí el Plan Oeste, o el Plan Soria. Mi obligación era defender mi provincia pero también hay que realizar esfuerzos solidarios. Lo creí entonces y lo creo ahora», aseveró.

Manifestó, por otra parte, no tener «ningún problema» por compartir territorio con el portavoz federal del PSOE. «He defendido siempre que el proyecto delPSOE en Castilla y León es producto de que tenemos voces plurales muy potentes», valoró. «Tenemos a Puente, tenemos a Iratxe García, tenemos a Ander Gil… Es que no sólo no me resta, sino que estoy convencido de que suma a nuestro proyecto político».

«Es muy importante el alcalde de Valladolid, pero me parece tan importante y tan partícipe de nuestro éxito como la alcaldesa de Murias de Paredes o el alcalde de Estépar. Hemos trabajado con los pies en el suelo y mirando a la cara a la gente. Aquí, en la Comunidad más grande de España, o estás en el territorio o estás perdido».

En cuanto a los retrasos del AVE a Burgos, lo achacó a que durante el Gobierno del PP «se hizo mal un puente, y hubo que tirarlo y hacerlo de nuevo» . Por otra parte, matizó que el AVE «llegó a Valladolid, llegó a Palencia, llegó a León, llegará a Burgos… el reto ahora es aprovecharlo bien. Las grandes infraestructuras han demostrado que no todas las veces están bien aprovechadas para la fijación de población, para la atracción de empresas, la creación de empleo».

También sobre infraestructuras, destacó que durante el tiempo de Gobierno del PSOE, aun en funciones «se terminaron tramos de la Autovía León Valladolid, se licitaron dos tamos de la Autovía del Duero… Han sido años muy duros de crisis económica, con mucho menos dinero para infraestructuras, pero a mí me preocupaba mucho más que no hubiera para lo otro, para la sanidad, para los servicios sociales o las ayudas a la dependencia», afirmó.

Tudanca lamentó especialmente que en Castilla y León no se constituyera un gobierno socialista. «Ganamos las elecciones. Tenemos 35 escaños y el PP perdió estrepitosamente. Pero frustraron la esperanza de un cambio, y lo hicieron con poca elegancia», lamentó. «Yo pasaré, como han pasado todos, pero Castilla y León ha perdido una oportunidad histórica». El líder de los socialistas terminó su entrevista con una promesa: «Yo seguiré dejándome todas las fuerzas para que esta Comunidad tenga futuro».

Artículos relacionados