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El PSOE denuncia que el Presupuesto de Sanidad “no sirve para reforzar el sistema público” ni soluciona las listas de espera

por Manuel Iglesias

El Grupo Socialista presenta 82 enmiendas por un valor de 68 millones de euros

 

El portavoz de Sanidad del Grupo Socialista en las Cortes de Castilla y León, Jesús Puente, sostuvo en el debate del Presupuesto de la Consejería de Sanidad que las cifras presentadas por el Ejecutivo de Mañueco y la extrema derecha “no afrontan las necesidades en sanidad de Castilla y León porque no refuerzan el sistema público de salud que nos merecemos”.

También señaló que este Presupuesto “no garantiza la senda del crecimiento de la financiación de la Atención Primaria hasta un 25% del presupuesto sanitario” que, recordó, es el “objetivo consensuado de las autoridades nacionales e internacionales de sanidad, salvo la de Castilla y León”.

Tampoco refuerza la necesaria inversión en personal con contratos de calidad y suficientes “ni ofrece solución alguna para la disminución de las listas de espera y solo ofrece privatización de las intervenciones quirúrgicas y de las pruebas complementarias”.

Puente señaló que la situación de la sanidad pública de Castilla y León “sigue encadenada y lastrada por la pésima decisión de financiar el HUBU con una concesión caníbal con los gastos públicos que impide afrontar muchas infraestructuras en toda la Comunidad autónoma”.

Porque, en definitiva, “solo el sector privado los aplaude y comienza a hacer números para incrementar sus negocios. Los hospitales privados de esta comunidad y los seguros privados tienen asegurado su crecimiento con estos presupuestos. Ya han comenzado a incrementar sus servicios de urgencias, sus quirófanos y sus pólizas porque cuentan con los beneficios de sus concesiones y convenios para recoger la demanda de los castellanos y leoneses que se ven expulsados del sistema público y acuden -los que pueden- a que el privado les ayude a recuperar su salud”.

Estos presupuestos, añadió Puente, “no generan ni proponen soluciones al deterioro de la sanidad púbica. No hay orientación ni liderazgo político más allá de la continuidad. No hay más propuesta política que resolver el día a día del funcionamiento”.

De hecho, el portavoz socialista aseguró que la sanidad privada está “haciendo planes para expandirse mientras se frotan las manos, porque lo único que hay en estos presupuestos es una banda de músicos que se hunde con el Titánic mientras tocan la misma melodía desde hace 37 años; y no es otra que si funciona, bien, y si no, sálvese quien pueda”.

Frente a la penosa gestión política de la sanidad autonómica, “las únicas señales positivas y novedosas que se aprecian en estos presupuestos vienen de fuera”. Así, mencionó la renovación de la resonancia magnética del Hospital Nuestra Señora de Sonsoles, en Ávila, gracias a los Fondos Feder; o los 2,6 millones procedentes del Estado, que se invertirán en un nuevo acelerador lineal en el Hospital Clínico Universitario de Valladolid.

También mencionó el anunciado plan de medidas urgentes para la reducción de la temporalidad en el empleo público “porque les ha torcido el brazo la Unión Europea y el gobierno de España”. Es el mayor proceso selectivo de la historia del Sacyl pero “no han sido capaces ustedes de realizar un censo de las plazas vacantes en sanidad porque no saben cuántas tienen dado que la última Relación de Puestos de Trabajo es de 2012 y está más que obsoleto”.

Además de las olvidadas estructuras del Plan de Inversiones Sociales Prioritarias, mencionó la “emergente e insoslayable necesidad” de incorporar a psicólogos a la Atención Primaria para atender la oleada de casos que necesitan ya herramientas para que los ciudadanos podamos afrontar con solvencia la realidad a la que nos enfrentamos día a día.

O la “imprescindible” inversión en profesionales para garantizar la estabilidad y suficiencia de los mismos para recuperar la atención clínica en la Atención Primaria y para dar solución estructural y duradera de las Listas de espera.

O la “justa” inversión en el diagnóstico y apoyo a las personas que sufren enfermedades raras. O el “pertinente” apoyo a las asociaciones de enfermos y sus familiares que necesitan el aliento de la Administración y no lo encuentran.

 

Valladolid, 22 de diciembre de 2022

 

 

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